miércoles, 27 de abril de 2011

¡Hagan sus apuestas, señores!

Observen el espectáculo de la pequeña acróbata y trapecista vestida de color azul que sube peldaño a peldaño esa escalera helicoidal interminable.

Admiren como si de una columna colosal del templo de Salomón se tratase, esa inmensidad de peldaños en espiral que se pierde en el vacío, miren, ¡miren como la chica al llegar a la cúspide se lanzará al vacío!

¿Creen ustedes que alguien la recogerá en su caída? ¿O creen por el contrario que se estampará contra el suelo haciéndose papilla?

¡Hagan sus apuestas, damas y caballeros!

¡El show va a comenzar!